Razones para un modelo de oración

Hay al menos cuatro razones sólidas para tener un modelo de oración establecido para el ministerio de oración. Estas cuatro razones forman un marco y una base saludables para practicar un ministerio de oración que se refleje bien en la comunidad. Es útil pensar que, incluso cuando oramos por alguien fuera de los muros de la iglesia, debemos reflexionar sobre la realidad de que representamos a otras personas, además de a nosotros mismos, que forman parte de la comunidad más amplia. Esta es una forma saludable de que las prácticas arraigadas en principios sólidos con amplia aplicación, independientemente de las creencias doctrinales, puedan reflejarse bien en la iglesia. 

Los principios del ministerio de oración pueden adaptarse dentro de las creencias y prácticas confesionales. Aquí mencionaremos brevemente cuatro principios que enmarcan el modelo de oración y en las próximas semanas se ampliará cada uno de estos principios. 

Un modelo invita a todos a participar en el ministerio de la oración. Esto es importante porque ofrece a las personas la oportunidad de profundizar en su espiritualidad tanto personalmente como en comunidad. Les ayuda a conectar con los demás. Es una forma sólida de que los laicos de la iglesia activen sus creencias y construyan relaciones entre sí. 

Un modelo crea expectativas para el ministerio de la oración. Hay expectativas en todos los niveles del ministerio en la iglesia y el ministerio de la oración no debería ser una excepción. Las expectativas se establecen en ambas direcciones, para los que dan la oración y para los que la reciben. Unas expectativas claras y conocidas por ambas partes son un signo de un ministerio saludable. 

Un modelo establece un marco para la rendición de cuentas en el ministerio de la oración. Hay barandillas que impiden que las personas autodefinan su papel o responsabilidad y sitúan la rendición de cuentas dentro de un marco establecido y aceptado por la comunidad. Estos principios y directrices proporcionan límites saludables para todos, creando un entorno en el que el ministerio de la oración puede florecer. 

Un modelo crea una forma de medir el progreso en el ministerio de la oración. Nos encantaría ver nuestras oraciones respondidas de forma inmediata y completa de la manera que normalmente ocurría en el ministerio de Jesús. Nuestra realidad es que no entendemos, practicamos ni integramos todo lo que Jesús fue e hizo mientras estuvo encarnado. Le seguimos lo mejor que podemos, pero también dejamos espacio para la imperfección que proviene de nosotros, de los demás y de un mundo roto cuando utilizamos un modelo de oración para ministrar a los demás. Un modelo que incluya un método para comprobar y verificar lo que está sucediendo es saludable para todos los que forman parte de un ministerio de oración.

Estas razones ayudan a comprender por qué seguir un modelo de oración es importante para el ministerio de la oración y permite adaptarlo a diversas estructuras eclesiásticas. Un camino saludable es parte del aspecto interpersonal que construye relaciones dentro del ministerio de oración. Tener en cuenta estos principios anima a quienes practican el ministerio de oración a crecer personalmente y a multiplicar el ministerio corporativamente. 

Bud Simon

¿Y si hay algo más en el ministerio de la oración? La oración a nivel personal y comunitario invita al Reino de Dios a cambiar en nosotros mismos y en nuestro mundo.

Anterior
Anterior

Invitación a todos a participar

Siguiente
Siguiente

¿Por qué utilizar un modelo de oración para el ministerio?